«Dicir el deseo»
Resumen
El presente trabajo pretende demostrar que Cernuda dedicó casi todoslos poemas de Los placeres prohibidos al amante que le inspiró un deseo más inmortal, Serafín Fernández Ferro. En uno de los poemas del libro, le sevillano se presenta a sí mismo muriendo como Orfeo, pero no el Orfeo que amó a Eurídice, sino el homosexual que sufrió por Calais, el hijo del viento.